La capital albanesa es una ciudad con una historia turbulenta. Las calles, anteriormente grises, se han transformado en un ambiente pintoresco y agradable. La ciudad que sigue preservando los diversos restos del pasado italiano, otomano y socialista de la ciudad ofrece numerosos atractivos turísticos. Durante tu estancia, no te olvides de visitar Bloku, la parte de la ciudad donde anteriormente vivían los más altos funcionarios comunistas, y que hoy en día se ha convertido en un barrio moderno, famoso por sus tiendas, bares y vida nocturna. Tirana es una ciudad animada donde no es fácil encontrar la paz y tranquilidad, pero si las estás buscando, dirígete al cercano parque nacional en la montaña Dajti, desde donde se ve toda la ciudad.

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